En este texto se analiza la primera temporada de Sitiados (coproducción de Fox International Channels, la productora independiente chilena Promocine y Televisión Nacional de Chile) considerando tres ámbitos: Narratividad/Serialidad, Televisualidad y Síntesis o interpretación hermenéutica. La serie, producida en el contexto de la conmemoración del Bicentenario de Chile, está ambientada, con respecto a la historia, en el sitio por parte de los mapuche al poblado colonial español de Villarrica, ubicado en el sur de Chile, ocurrido entre 1599 y 1602. El análisis realizado rompe una serie de mitos o discursos canónicos en torno a la colonia, la Guerra de Arauco y las relaciones entre colonos españoles y pueblos originarios, moviéndose hábilmente en su diálogo entre el pasado y el presente. De esta forma se propone una lectura sobre la construcción identitaria de lo chileno desde el presente, que resulta más matizada y compleja que las versiones clásicas consagradas. La producción, los contenidos, la construcción de personajes y la historia también es rica en explorar distintas representaciones de género.