El objetivo del presente trabajo fue analizar las variables de mayor influencia en la sensibilidad de la percepción sobre discriminación en general y en particular hacia las “personas de los sectores LGBTI”. Conforme con este objetivo, se estudió el papel mediador del nivel educativo formal en la sensibilización frente a la discriminación —definida como conducta orientada a apartar o desconocer a una persona o a una colectividad—, con base en la Encuesta Multipropósito de la Secretaría Distrital de Planeación y la Encuesta Bienal de Culturas de la Dirección de Cultura Ciudadana de la Secretaría de Cultura, Recreación y Deporte, en sus versiones de 2017, aplicadas por la Alcaldía Mayor de Bogotá, Colombia. Las muestras de las encuestas contaron con 319 952 personas en representación de 8 052 740 personas y con 16 312 personas en representación de 6 391 049 personas, respectivamente. El tipo de discriminación más frecuentemente observada fue por orientación sexual, más que por apariencia, raza, origen campesino, religión, ser hombre o mujer, condición económica o identificación con grupos sociales. Se encontró diferencia significativa en el porcentaje de personas que han presenciado discriminación por orientación sexual según el nivel educativo y el grupo etario del observador. Mediante la técnica estadística de modelado de los árboles de decisión, se encontró que las variables que más pesan, en orden de importancia, para decidir si una persona de los sectores lgbti es un peligro o no para la sociedad, son: el nivel educativo, el estrato socioeconómico, la edad y el sexo. Es así como las mujeres más jóvenes y con mejores niveles educativos tienen menor probabilidad de percibir a las personas de los sectores lgbti como un riesgo para la sociedad. El nivel educativo, como variable modificable mediante políticas públicas, posibilita cambios culturales hacia evoluciones sociales reales y favorece en los ciudadanos el ejercicio y el respeto de los derechos humanos.