“…El turismo alternativo basado en el beneficio del ciclicmo de montaña permitió a nivel ambiental, el contacto con la madre naturaleza ayudó a la salud física y mental de los participantes, contribuyó con la protección del ecosistema, concienciar a las personas sobre la importancia de los recursos naturales, evitar la tala, la quema que destruyen el medio ambiente, el ciclismo de montaña en un deporte ecológico es decir que no ocasiona daños al ecosistema,(Snyman, 2012). En lo social, el ciclismo es una actividad deportiva de turismo de aventura beneficia significativamente a la economía, tiene un gran potencial por sus condiciones favorables en su ejecución y equipamiento módico, promueve el mejoramiento de las relaciones interpersonales mediante el contacto con espacios naturales, senderos como destinos turísticos que ayudó ciclista al crecimiento personal y mental como ser humano(Soto, et al, 2017). En efecto, el ciclismo generó un beneficio significativo y sostenible en el desarrollo local, permitió la producción de fuentes de empleo, industria inversión pública, privada, aumento de los flujos turísticos, reposicionamiento de la ciudad como destino turístico, reproyección de la imagen de la ciudad y el desarrollo comunitario.…”