“…En ese sentido, el disfrute de las compras ha sido identificado como un predictor significativo del apego y de la lealtad a la tienda (Johnson et al, 2015). Frente a las diferentes características que componen el diseño de la tienda minorista, los supermercados son reconocidos por tener buena iluminación, aire acondicionado, diseño funcional de la tienda, buena organización y exhibición de los estantes, buena ubicación y amplitud de los pasillos (Anuradha & Viswanathan, 2016); además, los consumidores sienten que pueden promover sus hábitos alimenticios y saludables en un entorno seguro (Chamhuri et al, 2015) y mucho más confortable que los mercados tradicionales (White et al, 2007). En cambio, hay otro perfil de personas que no son tan sensibles a los atributos de diseño y consideran que los mejores productos son los que se venden en las tiendas que les son familiares, ya que si conocen, por ejemplo, al carnicero, por la confianza generada asumen que este les puede proveer un producto de mejor calidad.…”