“…Emocionalmente, conlleva una anticipación entusiasta y de ansiedad por el futuro, junto con sentimientos de nostalgia o frustración e importantes reajustes psicológicos (Sha-pero et al, 2015). Un período decisivo en el desarrollo de la madurez, donde se construyen los procesos autónomos de adquisición de hábitos que permiten el equilibrio saludable, que prevengan el desarrollo de trastornos clínicos asociados como depresión (Hankin et al, 2015;Guillén, Montaño, Fernández, Gordillo, & Solanes, 2013;Polanczyk, Salum, Sugaya, Caye, & Rohde, 2015;Suetani et al, 2017), trastornos adictivos, ansiedad y estrés o agresividad (Joshi, & Yadav, 2017;Páramo, 2011;Vangberg, 2013) tendencias autodestructivas, entre otros procesos desadaptativos (Gartstein, Slobodskaya, Zylicz, Gosztyla, & Nakagawa, 2010;Lombas, Martín-Albo, Valdivia-Salas, & Jiménez, 2014;López-Soler, Alcántara, Fernández, Castro, & López-Pina, 2010). Cloninger (2003), propone en su Modelo Psicobiológico de Personalidad la existencia de "causas internas que subyacen al comportamiento individual y a la experiencia de la persona" (Cloninger, 2003, p.3), buscando integrar el substrato biológico de la personalidad con el desarrollo producido por la experiencia y el aprendizaje socio-cultural (García, 2012).…”