“…En estos últimos años se han presentado algunos trabajos que relacionan el discurso regeneracionista con el desarrollo del deporte de finales del s. XIX y principios del s. XX (Bahamonde, 2011;Domínguez, 2009;González, 2010;McFarland, 2008;Pozo, 2000;Rivero, 2009;Rivero y Sánchez, 2011;Torrebadella, 2012bTorrebadella, y 2012cTorrebadella-Flix y Olivera-Betrán, 2013;Torrebadella-Flix y Nomdedeu-Rull, 2013;Vizuete, 2009). Sin embargo, estas aportaciones no han considerado suficientemente la relación existente entre la educación física y el deporte, tampoco se han ocupado de apuntar el impacto que supuso el citado movimiento en la creación de nuevas organizaciones institucionales y, menos todavía, en analizar los discursos subyacentes.…”