“…En muchos casos, la existencia de un documento de buenas prácticas relacionado con la sostenibilidad ayuda a mantener la confianza pública porque de alguna manera, dicho documento garantiza que cualquier persona que se suscriba a dicho texto sabrá, en principio, cómo actuar éticamente en este caso en el ámbito de la sostenibilidad. Por tanto, los documentos antes mencionados enumeran ciertos objetivos en el mundo empresarial, como mejorar la reputación corporativa , evitar la regulación Doig y Wilson, 1998;López, Dittmar y Vargas, 2021c), atraer inversiones (García y Valor, 2004), mejorar el clima laboral (Manley, 1991), incrementar la eficiencia de la organización (Mezher, Jamali y Zreik, 2002), en áreas significativas, como el medio ambiente, y prevenir conductas inmorales (Shwartz, 2001).…”