La monitorización del paciente crítico es fundamental para lograr optimizar la hemodinámica, la ventilación, la temperatura, la nutrición y el metabolismo del paciente. La mayoría de las monitorizaciones se realizan sobre procedimientos invasivos como cateterización venosa central y periférica, abordaje arterial, sondajes nasogástricos y vesicales, para obtener información hemodinámica, ventilatoria y metabólica. No obstante, también existen equipos tecnológicos especializados y nuevos algoritmos que pueden ayudar a obtener la mayor cantidad de variables y parámetros de manera no invasiva para lograr el mismo objetivo. El presente artículo no pretende establecer criterios comparativos sobre ventajas y desventajas de las técnicas de monitoreo invasivo y no invasivo, sino presentar, a modo descriptivo, la disponibilidad de las mismas como alternativas en el cuidado del paciente crítico. Para ello, se llevó a cabo una exhaustiva investigación en diferentes literaturas para presentar el contenido idóneo, con aportación importante al conocimiento del tema.