Las redes sociales digitales no solo propagan contenido útil, sino que también contribuyen a difundir informaciones falsas que contribuyen a la desinformación de la sociedad en diferentes contextos geográficos, políticos y culturales. Las agencias digitales de verificación de hechos -fact-checking en la terminología anglosajona- son vistas como un remedio eficaz contra este problema, junto con otras posibilidades o estrategias, como la exclusión de contenidos y la desmonetización de los propagadores. En consideración al impacto de la pandemia del COVID-19 (coronavirus disease 2019) en Brasil, este artículo investiga la importancia dada por las agencias de fact-checking de ese país, Fato ou Fake y Lupa, a sus verificaciones de noticias falsas sobre la COVID-19. Si durante los períodos iniciales de propagación de la enfermedad en enero y febrero de 2020, las verificaciones no alcanzaron el 20% del material informativo generado, a partir de marzo, las comprobaciones se intensificaron en relación a la pandemia, alcanzando una media de aproximadamente dos publicaciones por día.