En los últimos años en Chile se ha desarrollado una serie de acciones para asegurar la calidad de la formación docente, entre las que destaca la puesta en práctica de procesos obligatorios de acreditación. Los programas que forman profesores de Religión no han sido la excepción. No obstante, al 2019 solo seis instituciones han logrado certificarse a nivel nacional. Estos procesos de acreditación impactan, entre otras dimensiones, en la arquitectura curricular de tales ofertas formativas. Esta investigación, a través de un enfoque cualitativodescriptivo, estudia los seis casos mencionados, centrándose en el análisis de sus perfiles de egreso, dentro del marco de la enseñanza fundamental de la Iglesia católica sobre el rol de la educación religiosa en el sistema educativo.